¿Cómo se enfrenta la pandemia en el sector minero?

Prevención de SARS Cov-2:

La doctora Gloria Marín, infectóloga del Centro Médico del Trabajador – CMT – comparte las recomendaciones para los trabajadores que se desempeñan en este rubro

Sin duda la pandemia de Covid19 ha dificultado el normal desempeño en todos los rubros laborales. Durante meses de confinamiento, muchos sectores dejaron de operar o convirtieron su operación a remoto-online. Sin embargo, la minería es una actividad esencial para el país – que aporta un gran porcentaje del PIB – por lo que, aunque se limitó la actividad minera, los trabajadores de la industria siguieron cumpliendo sus funciones de forma presencial, con todo lo que ello implica, y hoy son más de 260 mil quienes se desempeñan en esta industria. De acuerdo al biministro de Energía y Minería, Juan Carlos Jobet “la minería ha hecho una enorme contribución no solamente porque fue capaz de mantener su capacidad de producción, la creación de empleo y aporte fiscal en un año muy difícil para todos. También pudo contener la crisis sanitaria con indicadores Covid sustancialmente mejores que el promedio nacional y aportar a las comunidades de todo el país” , destacó reconociendo los estrictos protocolos sanitarios aplicados en las distintas faenas.

El Ministerio cuenta con un protocolo particular de control y prevención en faenas de la industria minera  https://www.minmineria.cl/media/2020/11/Protocolos-Covid-19-Mineria-Final.pdf  que contempla medidas que deben implementar las empresas y la prevención por parte de los trabajadores.  “La minería, como cualquier trabajo que concentra un gran grupo humano, requiere de medidas de prevención contra el Sars Cov2 muy claras, eficaces y supervisadas idealmente por tercero”, explica la doctora Gloria Marín, infectóloga de CMT. Ello, implica un gran compromiso del trabajador con su cuidado y con el de su equipo, por lo que la empresa debiera exigir su inmunización (vacunación completa), el uso de mascarillas en espacios comunes, distanciamiento social, cumplimiento de aforos, lavado de manos frecuente o uso de alcohol gel o en su defecto.  “Es difícil vigilar un grupo humano grande, por tanto, el compromiso de cada trabajador es la labor fundamental para prevenir un brote y para esto es exigible que deban conocer e implementar los protocolos que cada empresa tiene para el manejo de prevención de Covid en terreno”, explica.

Esto es especialmente importante por las complejidades que implica el trabajo en minería:  “requiere traslado en móviles a faena, tiene un rol de turnos, hay esfuerzo físico, hay estrés y cansancio y esto favorece que existan quiebres en las medidas preventivas, ya sea en  el traslado o en la faena misma, e incluso en periodos de descanso entre turno cuando se encuentran con sus familias, en que habitualmente uno se relaja y el trabajador podría infectarse a través de contactos externos”, dice Marín.

Entre las medidas que recomienda la doctora a los trabajadores se cuenta:

• Adecuado uso de mascarilla ya sea – quirúrgica o idealmente kn95 – especialmente estas últimas en los traslados de más de 2 horas a faena
• Cumplimiento de los aforos definidos en las unidades donde comparten con otros trabajadores
• Mantener el necesario distanciamiento social y no saludar con contacto físico
• Lavado de manos con agua y jabón – siempre si hay suciedad visible- o aplicación de alcohol gel, todas las veces que sea necesario (especialmente antes y después de comer y al retirarse la mascarilla)
• No compartir objetos de uso personal como máscaras, lentes, antiparras, lápices, entre otros.
• Mantener el aseo de la estación de trabajo, es decir hacer limpieza de los teclados del computador, del mouse, con alcohol isopropílico y mantener limpia la superficie del escritorio
• Ventilar los espacios que comparto con otras personas. Lo ideal es que siempre exista una corriente de aire fresco y que haya un recambio de aire frecuente de la habitación

Es importante, destaca la doctora, avisar siempre al supervisor si hay sospechas de ser contacto estrecho – antes de subir a faena – porque eso evita que se propague un brote. Y por supuesto, si es que existen síntomas sugerentes de infección – fiebre, pérdida del olfato, tos, dolor de garganta, dolores musculares (mialgias), cefalea o dolor de cabeza, falta de aire o disnea.

Esto se hace mucho más relevante en el contexto de la llegada y transmisión de la variante Delta en el país, la que es muchísimo más contagiosa – entre 2,5 a 3 veces más que las cepas ya conocidas-   por lo que hay que extremar las medidas preventivas.  Los casos iniciales fueron importados, pero ya hay casos de transmisión comunitaria y, efectivamente no es en la faena, sino en la comunidad cuando las personas se relajan más. Cuando el trabajador llega a su casa, hay una reunión de fin de semana y hay invitados, ahí es donde pueden haber más quiebres de medidas preventivas y uno puede volver enfermo a trabajar, complicando muchísimo el tema al generar un brote en, por ejemplo, una población minera.